lunes, 4 de junio de 2012

Es difícil pensar en positivo cuando las cosas salen mal, es difícil que las cosas te salgan bien a la primera. Pocas personas se sincerarán contigo, y te elogiarán. La mayoría de veces recibirás críticas, sin base alguna, sin argumentación, sin conocerte. Tan sólo por las apariencias. La gente nunca verá más allá de tu interior. Somos crueles, pensamos que no somos el prototipo de persona que odiamos, pero somos más excépticos, más intolerantes aún. Nos quejamos de vicio. Nos quejamos de todo el mundo, criticamos demasiado. Pero no es culpa nuestra, es culpa de la sociedad que nos ha hecho así. Procuremos sacar una sonrisa a la gente, y a ver el lado bueno de las cosas. Pensemos que podemos crear un futuro mejor, para las próximas generaciones. Saquemos esa sonrisa y llevémosla de paseo, y limitémonos a respetar lo de los demás y a ocuparnos de cuidar nuestro jardín 






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